Como un reconocimiento al periodismo que lucha contra la corrupción, así fue recibido por Mónica González el Premio Nacional de Periodismo que le acaba de ser entregado por parte del Ministerio de Educación de Chile.
“La corrupción se ha convertido en una lacra y el buen periodista está llamado, en este momento de crisis, a ser mejor que nunca. El buen periodismo es la esperanza para todos”, afirmó la fundadora del CIPER (Centro de Investigación e Información Periodística) al recibir el galardón.
Mónica es una de las integrantes del grupo de cinco maestros que desde 2018 acompañan a Javier Darío Restrepo en su labor de responder las preguntas que constantemente llegan al Consultorio Ético de la FNPI. La acompañan Gumersindo Lafuente, Jorge Cardona y Álex Grijelmo.
Además, estará presente en el Festival Gabo 2019, dictando el taller Después de Lava Jato: cómo investigar el poder real, en el cual editores y periodistas reflexionarán sobre los métodos para no quedarse en el mero lamento o denuncia, sino fiscalizar de manera efectiva el poder para ayudar a promover e impulsar el cambio y fortalecer la democracia.
El reconocimiento a Mónica llega luego de que se creara una petición en Change.org, la cual recopiló más de 18.000 firmas, para llamar la atención respecto a la injusticia que representaba que Mónica no hubiera sido todavía reconocida por el Jurado del Premio Nacional de Periodismo de Chile, pues fue la primera en investigar casos de corrupción que comprometieron al propio Augusto Pinochet. Debido a su trabajo periodístico, en 1983 la dictadura la encarceló en el penal de San Miguel, una cárcel de hombres.
Entre los firmates de la petición, que además crearon un sitio web para promover la iniciativa, figuraron periodistas chilenos, como Andrés Azocar y Francisca Skoknic, quienes han participado en la Red Ética como blogueros invitados. En redes sociales fue tendencia la etiqueta #FirmoxMonica, con la cual miles de personas de todo el continente manifestaron su respaldo a la iniciativa.
A lo largo de su carrera, Mónica ha sido distinguida ya con otros reconocimientos como el Premio Mundial Unesco-Guillermo Cano de la Libertad de Prensa en 2010; el Premio María Moors Cabot, entregado por la Universidad de Columbia en 2001; y el Luis M. Lyons Award for Conscience and Integrity in Journalism, entregado por la Universidad de Harvard en 1988.
Como respaldo a la iniciativa, un grupo de destacados periodistas latinoamericanos firmaron una carta en la que manifestaban sus razones para que el Jurado del Premio Nacional de Periodismo viera que ya era hora de reconocer el trabajo de González. Entre los firmantes de la misiva figuran Marcela Turati (México), Hugo Alconada (Argentina), Gina Morelo (Colombia), Gustavo Gorriti (Perú), y Daniel Moreno (México), entre otros.