Nexo Jornal es un pequeño portal de noticias a las que solo tienen acceso sus suscriptores, el cual ha visto cómo su trabajo tiene cada vez mayor influencia en Brasil. Por eso Marina Menezes, su editora ejecutiva, fue una de las invitadas a compartir sus experiencias en el seminario Estrategias digitales para impulsar las interacciones con las audiencias 2018, realizado en Bogotá por la alianza entre la FNPI y Facebook.
Durante su intervención en el seminario, Menezes explicó la estrategia informativa de su portal, que no busca competir por los clics de los lectores ávidos de noticias de última hora, sino por aquellos que prefieren el análisis, el contexto y entender las historias de una manera más completa.
Aprovechando uno de los intermedios del evento, Menezes conversó con Hernán Restrepo, el gestor de contenidos de la Red Ética, sobre la actual coyuntura política que vive Brasil, cómo logran innovar constantemente en su manera de informar, y los motivos por los que han logrado ganar influencia a través de sus redes sociales.
¿Cuál es la estrategia de Nexo Jornal para cubrir estas particulares elecciones presidenciales en Brasil?
Vamos a hacer lo que hacemos siempre, que es brindar explicación y contexto. No vamos a preocuparnos por las ‘breaking news’. Lo que hacemos muy bien son las infografías y el periodismo de datos. Además, no queremos enfocarnos tanto en las elecciones regionales, sino en las presidenciales por medio especialmente de la visualización de datos.
Una de nuestras grandes ideas para la cobertura de elecciones es cubrir ideas y no personas. Estamos ante las elecciones presidenciales con el mayor número de candidatos en la historia de Brasil, y queremos discutir las ideas detrás de sus candidaturas. También queremos contribuir a la formación política, ayudando a entender por medio de videos explicativos a la gente qué sucede, por ejemplo, con los votos en blanco. Y finalmente, nos esforzaremos por mantener el rigor, el cuidado editorial, porque estamos en un momento muy delicado de la historia de nuestro país, y sabemos que debemos ser especialmente cuidadosos con la verificación de la información antes de publicarla.
Brasil, al igual que otros países del mundo, ha visto cómo aquellos candidatos que manejan un discurso de odio hacia las minorías son precisamente los que ganan más popularidad. ¿Cómo manejan ustedes este tipo de declaraciones de los políticos que incitan al odio y suelen terminar ocupando grandes titulares?
Por nuestra forma de trabajar, buscando siempre brindar explicación y contexto, nunca vamos a reproducir una declaración de un candidato simplemente porque sea explosiva. Lo que sí hacemos es discutir la idea que está por detrás. Por ejemplo, recientemente el comandante del Ejército hizo una declaración en Twitter sobre el juicio al presidente Lula, donde afirmaba que el Ejército estaba ahí para defender las instituciones y que rechazaba la impunidad. Lo que hicimos fue explicar si el Ejército podía o no emitir opiniones políticas, no centrarnos en la declaración como tal, porque ya todos los demás medios lo habían hecho.
El encarcelamiento de Lula tiene al país tremendamente polarizado políticamente. ¿Cómo hacen en Nexo para evitar que los califiquen como un medio pro o anti Lula?
Siempre habrá gente que nos acuse de estar a favor de un lado o del otro. Algo que es importante para nosotros es prestar atención a los comentarios de la gente en redes sociales. Y por eso respondemos tanto a los comentarios que nos acusan de estar a favor como a los que nos dicen que estamos en contra de algún político. Lo que hacemos es buscar siempre el equilibrio. Nuestros titulares son muy neutrales, porque lo que nos interesa es que la gente entienda las ideas, lo que está sucediendo por detrás de las noticias. Por ejemplo, en casos como el de la intervención militar en las favelas de Río, buscamos consultar a analistas con posiciones opuestas. Créeme que encontrar un analista que estuviera de acuerdo con el ingreso de tropas del Ejército a las favelas no fue fácil. Pero es un esfuerzo que tenemos que hacer. Es por eso que a menudo recibimos mensajes de lectores que nos dicen que no están de acuerdo con lo que decimos, pero creen que hacemos un buen periodismo y por eso son suscriptores nuestros.
¿Cómo llegaron a la conclusión de que los lectores digitales sí están dispuestos a leer textos largos, que además aparezcan varias horas después de que ocurra una noticia?
Esta ha sido la apuesta de nuestro modelo. Comprobamos que esas personas dispuestas a leer más existen. Es cierto que estamos compitiendo por la atención de la gente todo el tiempo. Pero lo que nosotros entendimos es que el lector digital agradece el poder enterarse completamente de una noticia, sin necesidad de hacer tres, cuatro o seis clics. Prefieren tener toda la información en un solo lugar, sin necesidad de estar saltando de un fragmento de la noticia a otro. Y tampoco es que nuestros textos sean tan largos. En los dos primeros párrafos les enteramos de lo principal, lo demás es el análisis con el que enriquecemos nuestro contenido.
¿Finalmente, qué opinas sobre la decisión que tomó Folha de São Paulo al abandonar Facebook, por considerar que era una plataforma que estaba reduciendo la visibilidad de la información brindada por el periodismo profesional?
Las redes sociales tienen su lado dulce, pero también su lado amargo. Nosotros estamos muy agradecidos con Facebook porque somos una redacción pequeña en el centro de São Paulo, pero gracias a las redes sociales nos conocen en todo Brasil. Parte constituyente de nuestra estrategia es estar en las redes sociales, así seamos un medio al que solo se puede acceder por suscripción. Salir de Facebook puede funcionarle a Folha para llamar la atención sobre un problema que ellos quieren denunciar. Pero nosotros no podríamos hacerlo.