Tuitdebate, a propósito del devastador paso de los huracanes Iota y Eta, que han devastado las costas de varios países de Sur y Centroamérica.
Informando con responsabilidad y claridad sobre los riesgos existentes, es posible salvar vidas y evitar la propagación de enfermedades entre los damnificados.
Los rumores no chequeados se transmiten como la espuma. Se deslizan con total fluidez por las plataformas digitales y siembran también el odio.
Lo que falta para evitar que una autoridad nos diga cómo debemos hacer nuestro trabajo es control, pero desde nosotros.
El libro de la periodista Ceinett Sánchez busca contribuir con la expansión de cultura preventiva en medio de situaciones de crisis a través de la sana y oportuna información.
La gestión de la comunicación y redes sociales en medio de crisis, se convierte inmediatamente en las “relaciones públicas de las crisis”
Cuando se desata una crisis, las fuentes confiables, tales como las organizaciones de noticias, deben tener cuidado y comprobar la masa de mensajes que se publican para poder así informar a la opinión pública con precisión y hechos comprobados.
¿Cómo tratar a las víctimas al entrevistarlas luego de una tragedia? ¿Cómo tratar con los rumores que circulan por redes sociales tras una catástrofe? ¿Deben publicarse las imágenes de cuerpos mutilados y personas sangrando? ¿Cómo informar sobre la magnitud de la tragedia sin herir la susceptibilidad de la audiencia?