¿Cuáles son los factores que influyen mayormente en contra de la práctica de la ética profesional periodística? Las consultas recibidas en esta página permiten una aproximación a la respuesta. Allí aparecen estos factores:Deficiencias en el conocimiento. La ética de una profesión es la obediencia a la naturaleza de esa profesión y esto supone conocimiento de esa profesión. El caso más común es el del periodista que no tiene un claro concepto de la naturaleza de la profesión y la confunde con el ejercicio de la publicidad, por ejemplo, o con la práctica de las relaciones públicas, o con el trabajo de creación de imagen institucional o personal por eso, detrás de numerosos errores éticos se encuentran un escaso conocimiento y una débil o inexistente identidad profesionalLa contradicción entre los objetivos de la empresa periodística y los principios éticos del periodista. Mientras el periódico o el noticiero piensan como una empresa cualquiera, con su misma lógica comercial, el periodista proyecta su trabajo dentro de unos valores éticos que lo ponen en conflicto con sus empleadores.Los malos sueldos de los periodistas, que convierten en un acto heroico su independencia, o la ponen en grave riesgo.
Documentación.
¿Desde dónde construimos el medio: desde el mercado o desde la utopía?
Estamos construyendo los medios día a día a partir de lo que creemos que quiere el mercado y eso es otra de las grandes mentiras del periodismo. Si uno va y le pregunta a la gente qué quiere, responderá con lo que conoce y conoce lo que ya hay. Entramos en un círculo vicioso y nos estamos repitiendo. Detrás de cada medio debe haber un proyecto de país. Eso nos puede sacar un poco de esa lógica tramposa del mercado.
Dañamos a terceras personas por brutos, porque no somos capaces de construir técnicamente, porque no tenemos la capacidad profesional. Para que haya un problema ético tiene que haber un conflicto y este se da justamente en el espacio entre lo deseable y lo posible.
Otro de los grandes dilemas que tenemos siempre es separar a la empresa como si fuera otra cosa. Nosotros lo vivimos concretamente en Guadalajara cuando quisimos separar al dueño de la empresa de la redacción: los malos y los buenos. Aquello acabó en un conflicto con el propietario del periódico que nos llevó a salir y fundar otro periódico. Pero no resolvimos el problema porque empresa y redacción deben ser un solo proyecto que se tiene que construir, una sola idea de trabajo.
Diego Petersen Farah.
ética, Calidad y Empresa Periodística en América Latina. Memoria del seminario en Monterrey, 01-09-03. FNPI, CAF. Caracas, 2004. Páginas 31 y 32