¿Es ético el uso del sarcasmo en el ejercicio del periodismo? Las características del sarcasmo indican que se trata de un arma vedada para el periodista que informa a través de la noticia.
En efecto, el sarcasmo es burla y el buen periodismo se distingue por su respeto a las personas, a toda persona.
Es burla sangrienta y cruel, agrega la descripción. Esto no corresponde en modo alguno a la relación que el periodista establece con sus lectores, que es la de un respetuoso servicio.
Esa misma clase de relación excluye el efecto del sarcasmo que es la ofensa y el maltrato de las personas. Un principio ético señala que la verdad periodística no debe hacer daño, por tanto, evita cualquier ofensa o maltrato.
En las columnas de opinión se hace uso de la ironía, que es una forma inteligente y fina de hacer burla, y se convierte en un apreciable juego de ingenio cuando hace entender lo contrario de lo que se dice o expresa. Como tal, la ironía es tenida como un recurso válido de los columnistas y polemistas. En cambio, el sarcasmo, por hiriente y destructor, es tenido como arma innoble que le está vedada al periodista, para quien constituye un mandato la vieja sentencia: "no hagas como periodista lo que no puedes hacer como caballero".
Documentación.
Frustrar la manifestación de opiniones divergentes, impedir el debate sereno y usar el insulto, es poner trabas y corromper el ejercicio de la profesión.
Código de ética de periodistas del Brasil, a.12.
Se prohíben los ataques injustificados contra funcionarios públicos, instituciones o grupos.
Código periodístico de Corea del Sur. C. 1.
Se consideran faltas graves a la ética profesional periodística los ataques injustificados al honor, la dignidad o el prestigio de las personas, instituciones o grupos.
Código de los periodistas de Chile A 5 c.
Respete la dignidad del individuo, siempre ponga a un hombre el prefijo de "señor" y nunca denigre a un hombre porque haya aparecido en un tribunal.
Código periodístico de Gales. A 8.
Constituyen faltas graves para un periodista la difamación, la incitación al odio y toda acusación falta de fundamento contra una nación, una comunidad, una religión o una raza.
Código de periodistas de Israel. A 6.