¿Qué tan sano es para el periodismo el periodismo de suplantación? ¿Qué tan real puede ser el contenido cuando se finge una situación para nutrir un texto? Decía Gabriel García Márquez: "en el oficio de reportero se puede decir lo que se quiera con dos condiciones: que se haga de forma creíble y que el periodista sepa en su conciencia que lo que escribe es verdad. Quien cede a la tentación y miente, aunque sea sobre el color de los ojos, pierde". El objetivo del periodista es que le crean a ojos cerrados todo cuanto informa sin reticencias ni desconfianzas. Y esto es lo que se espera de él.
La preparación intelectual del periodista en técnicas de investigación y de comunicación, se propone habilitarlo para buscar, encontrar y difundir la verdad de los hechos de cada día, porque este es el servicio específico que el periodista le debe a la sociedad: la verdad de los hechos diarios. Si este servicio no se presta � por la razón que sea- el periodismo no tiene razón de ser y el periodista se convierte en un peso muerto para la sociedad.
Esto explica el rigor con que códigos y manuales de estilo rechazan cualquier clase de engaño al lector. El lector debe encontrar en su medio de comunicación, una información del todo confiable. A veces se compara esa confianza con la que deposita el ciego en su lazarillo, que hace las veces de sus ojos. El periodista hace las veces de los ojos y los oídos de la sociedad, esa es su tarea y en esos términos debe cumplirse el ejercicio profesional.
Fingir una situación es una forma de engaño al lector. Así lo sintieron los directivos de The Washington Post cuando su redactora Janet Cooke recibió el premio Pulitzer por un trabajo en el que había fingido que su protagonista existía y que había hablado con ella. El periódico no admitió ese engaño, obligó a la redactora a devolver el premio y se disculpó ante los lectores. Un periódico decente rechaza cualquier forma de engaño al lector.
Documentación.
La primera misión de un diario consiste en decir la verdad tan aproximadamente como esa verdad pueda ser averiguada. El periódico debe decir toda la verdad en la medida en que pueda enterarse de ella.
Código de Conducta de The Washington Post.
Los diarios y periódicos deberán tener cuidado de no publicar material inexacto, engañoso o tergiversado...
... Los periodistas no deberían obtener o tratar de obtener información o fotografías por medio de simulaciones o subterfugios.
Código de Prácticas de la prensa británica.
Está terminantemente prohibido firmar una noticia en un lugar en el que no se encuentra el autor, ni siquiera en el caso de los enviados especiales que elaboren una información recién llegados de un viaje.
...Queda prohibida toda manipulación de las fotografías que no sea estrictamente técnica. Por tanto no se puede invertir una fotografía, ya se trate de personas, paisajes o edificios.
... No se podrá alterar el diálogo que el periodista consiga extraer durante una conversación, ni incluir matizaciones que no figuren en la cinta magnetofónica.
Libro de Estilo de El País, de Madrid. A 1.25. 1.32 1.36
Ninguna fotografía noticiosa puede ser sometida a tratamientos electrónicos o de otro género que tengan como fin obtener una imagen diferente de la que captó la lente del fotógrafo...Esta es una norma terminante que se funda no solamente en razones de ética y de compromiso del periódico con sus lectores, sino en la prevención de problemas legales.
Manual de Redacción de El Tiempo, Bogotá. A 6.02.01