El fin del 2020 coincidió con las noticias sobre el comienzo de la distribución de las vacunas de Pfizer, Oxford-Astra Zeneca y otros laboratorios que anunciaron con bombos y platillos que sus productos tendrían una efectividad superior al 90% contra la temida neumonía de Wuhan que tantos estragos causó en el mundo entero.
El optimismo ha acompañado los reportajes de los medios de comunicación que han informado sobre el comienzo de las jornadas de vacunación en distintos países, ha de ser tomado con cautela. Como lo advierte Gemma Tramullas en El Periódico, la euforia por la vacunación por el coronavirus puede crear confusión y además una falsa sensación de que la pandemia ya ha terminado.
Otro reto que se presenta para la prensa ante la llegada de las vacunas es la lucha contra las teorías conspirativas y la cantidad de desinformación circulante, que solo tiene el propósito de reforzar las creencias de los grupos antivacunas que amenazan con convertirse en un verdadero reto para las instituciones encargadas de promover la vacunación.
No, la vacuna contra la COVID-19 no alterará el ADN de quienes se la pongan, tampoco implantará un microchip creado por Bill Gates, y tampoco fueron creadas gracias al tejido de fetos abortados. Estas son algunas de las afirmaciones de estas teorías conspirativas, que ha desmentido ya la BBC.
Para hacerle frente a tanta desinformación referente a la vacunación que está circulando actualmente, la Asociación de Prensa de Madrid ha emitido una serie de recomendaciones útiles para periodistas de todo el mundo:
• Los medios de comunicación pueden contribuir a incrementar la “confianza vacunal” de la población informando de los procedimientos altamente regulados que preceden a la autorización de una vacuna, también las de la Covid-19, y que garantizan la seguridad de las vacunas aunque se arbitre un mecanismo de aprobación de urgencia.
• La voz de las personas expertas es muy importante en la información y la divulgación de la vacunación, tanto en espacios de noticias o en programas de reportajes de actualidad, como en magacines informativos o de entretenimiento.
• En relación con la vacunación contra la Covid-19, hay que ser cuidadosos con el contraste de la información. Es importante aportar datos sobre los resultados oficiales de la eficacia y la seguridad de las vacunas, y evitar difundir especulaciones interesadas.
• Un acontecimiento adverso tras la vacunación es cualquier hecho médico desfavorable que sigue a la vacunación y que no necesariamente tiene una relación causal con el uso de la vacuna.
• Es importante que los medios muestren las consecuencias que la enfermedad tiene en la salud de las personas y en la sociedad,la gravedad de la transmisión y las consecuencias derivadas de no disponer de una vacuna o de rechazar su administración.
¿Qué precauciones tener al informar sobre las vacunas contra el coronavirus? ¿Cómo informar sobre las jornadas de vacunación sin generar una sensación de falsa seguridad? ¿Qué tanta visibilidad darles a las opiniones de quienes dicen que no se vacunarán? ¿Cómo hacerle frente a las teorías de conspiración y a la desinformación que circula sobre las vacunas?
Para responder a estas y otras preguntas, los seguidores de nuestra cuenta @Etica participaron en uno más de nuestros tuitdebates usando la etiqueta #ÉticaEnRed. Los mejores trinos producidos durante la hora del debate fueron recopilados en el siguiente Momento de Twitter.
La Red Ética es posible gracias a la alianza entre la Fundación Gabo, Grupo Bancolombia y Grupo SURA, la cual propone un espacio de reflexión y debate acerca de los cambiantes desafíos éticos del oficio periodístico.