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Llega de nuevo esa época del año en la que a las redacciones de los medios comienzan a llegar regalos e invitaciones a eventos para despedir el año que se va.
Sobre los dilemas que para un periodista representa el recibir regalos de sus fuentes, nuestro Consultorio Ético ha respondido en reiteradas ocasiones.
“Sean invitaciones, privilegios, dádivas o cualquier clase de beneficios, siempre tendrán una contraprestación que, en últimas, es un recorte de la libertad periodística”, ha respondido el maestro Javier Darío Restrepo al respecto.
En cuanto a las invitaciones a fiestas, Restrepo aconseja la misma actitud prudente y distante del periodista hacia sus fuentes. “Los periodistas miran con desconfianza esas invitaciones porque es inevitable la sospecha de que pueden ser o convertirse en coyunturas para el soborno”, señala.
Sin embargo, estas fiestas pueden representar oportunidades para conocer noticias, o establecer contactos con nuevas fuentes de información. Esto convertiría estos eventos en oportunidades para el periodista que asista a ellos.
¿Debería el periodista negarse siempre a asistir a fiestas con sus fuentes? ¿Comprometen las invitaciones a fiestas la independencia del periodista? ¿Pierde credibilidad un periodista que es visto en una fiesta de fin de año con sus fuentes? ¿Qué hay de la oportunidad para enterarse de noticias o establecer contactos que estas fiestas pueden representar? ¿Es igualmente desaconsejable ir a fiestas convocadas por agencias de relaciones públicas?
Para responder a estas preguntas, los seguidores de la cuenta @Etica participaron en uno más de nuestros tuitdebates usando la etiqueta #ÉticaEnRed. Los mejores trinos producidos durante la hora del debate fueron recopilados en el siguiente Momento de Twitter.
¿De fiesta navideña con tus fuentes?
La Red Ética es posible gracias a la alianza entre la FNPI, Grupo Bancolombia y Grupo SURA, la cual propone un espacio de reflexión y debate acerca de los cambiantes desafíos éticos del oficio periodístico.