¿Puede el periodismo y el marketing llevarse de la mano?

Respuesta:

El ideal es que mercadeo y periodismo pudiesen mantener una relación de subordinación del mercadeo frente al periodismo. En efecto, es el mercadeo el que debe estar al servicio del periodismo y no al contrario.

El papel del periodismo al servicio de toda la sociedad solo se puede cumplir dentro de una total independencia frente a los poderes que operan en la sociedad. Y el del dinero -razón de ser del mercadeo- lo mismo que el del poder político o el gubernamental, son poderes de los que el periodismo debe mantenerse en total independencia.

El principal papel de la prensa en la sociedad es el de la fiscalización del poder con el fin de que este, en cualquiera de sus formas, se mantenga al servicio de la sociedad. Para cumplir ese objetivo el periodismo no admite dependencias; es la razón que explica la insistencia y radicalidad de las normas de los códigos de ética que hacen ver, como prácticas dañinas, los compromisos de silencio o de control de la información, con patrocinadores, anunciantes, empresas, negociantes o gobernantes.

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Es, también, lo que explica, dentro de la coyuntura creada por la tecnología digital, la búsqueda que se hace hoy de una estructura financiera diferente de la tradicional fundada en pautas publicitarias y patrocinios. Esa estructura diferente deberá ser la que blinde la independencia y credibilidad de periodistas y medios.

Las experiencias en marcha encuentran que el apoyo financiero ideal es el que ofrecen los lectores a través de las suscripciones; así se está llegando a una estructura que prescinde de los anunciantes y patrocinadores.

El mercadeo, dentro de estas nuevas condiciones, está dando a los medios el apoyo financiero que necesitan. Sus prácticas para obtener suscriptores y asegurar su fidelización garantizan la independencia de los medios.

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Documentación

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Esta independencia radical representa una excepción en su categoría, la prensa diaria nacional de información política y general. Constituye la razón de ser de las prácticas profesionales de la redacción y la ambición empresarial de todo el equipo: un periódico de periodistas, una empresa sin ánimo de lucro, una aventura editorial y económica dirigida a demostrar que nuestro trabajo de informar puede obtener la confianza del público, crear valor y servir a la sociedad.

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