En la era digital el periodismo se enfrenta a desafíos cada vez mayores. Muchos periodistas, por ejemplo, se ven obligados a trabajar desde sus salas de redacción debido a la cantidad de información que surge en el día a día y a la inmediatez con la que se le debe entregar a la audiencia, perdiendo así la posibilidad de hacer reportería en las calles. Sin embargo, gracias a las redes sociales y a distintas plataformas digitales, ahora también tenemos acceso a información de lugares a los que, por diversos motivos, no podemos acceder físicamente.
En este contexto, se vuelve necesario hablar de la importancia de hacer una buena cobertura periodística cuando no es posible estar presentes en el lugar de los hechos. Por eso, te dejamos tres consejos básicos pero fundamentales para cumplir con tu trabajo de forma remota.
1. Busca fuentes confiables y diversas que estén en lugar de los hechos
Empieza por informarte sobre cómo es o cómo funciona la cotidianidad en el lugar sobre el que quieres informar: ¿qué tipo de personas lo frecuentan o lo habitan? ¿Conoces a alguien que está familiarizado con el hecho o la zona? ¿El hecho sobre el que vas a informar es habitual allí o no? Estas respuestas te darán pistas para que puedas contactar a funcionarios de la zona, organizaciones relevantes, personas locales o a otros medios de comunicación que estén cubriendo la noticia de cerca. Recuerda que buscar distintos puntos de vista ayudará a darle equilibrio a tu historia.
2. Utiliza la tecnología a tu favor
Las periodistas Tina Rosenberg y Roxanne Patel Shepelavy sugieren preguntarle a alguna de tus fuentes en campo si es posible hacer una llamada telefónica o videollamada y que sean tus ojos en el lugar: pregúntales qué ven, quiénes están presentes, qué descripciones pueden hacer de lo que está sucediendo y del entorno físico en el que están. También puedes buscar testimonios o imágenes compartidas en redes sociales, sitios de transmisión en vivo, e incluso herramientas de geolocalización para obtener datos relevantes sobre la ubicación y el contexto de los hechos.
3. Cuida a tus fuentes
Isabella Meibaur nos recuerda en que la forma en que recolectamos y transmitimos la información puede tener un impacto significativo en las personas que se encuentran en el terreno. Así que debes asegurarte de velar por su seguridad y de presentar la información de manera responsable y ética para que tu cubrimiento no ponga en riesgo la vida de otros.
Si bien la rápida evolución de la tecnología nos obliga a replantear constantemente la forma de hacer periodismo, también nos brinda herramientas y nos da nuevas oportunidades para informar y conectar con audiencias mucho más amplias y diversas, así que al adaptarnos a estos cambios estamos asegurando el cumplimiento de nuestro deber ser: ofrecer un periodismo relevante, responsable y valioso. Recuerda que antes de utilizar la información recopilada en tu cobertura debes verificar cuidadosamente su autenticidad y su veracidad, este es un paso primordial para asegurarle a tu audiencia que estás haciendo un cubrimiento ético y preciso.
Este contenido fue publicado originalmente en nuestro boletín mensual. Suscríbete aquí y recibe una vez al mes todas las novedades de la Red Ética en tu correo electrónico.