Los formatos periodísticos han cambiado y así mismo lo ha hecho el proceso de investigación. Las herramientas cada vez se hacen más avanzadas y los periodistas deben responder a una tecnología que pone a su disposición nuevas formas para procesar la información. Es allí, en la creación de nuevas narrativas, donde entra la propuesta del taller ‘Investigaciones digitales: ética, metodología y herramientas’, dictado por Irving Huerta, María Teresa Ronderos, Rigoberto Carvajal y Fabio Natali.
Las claves para la creación
Irving Huerta, miembro de la mesa editorial de CONNECTAS e instructor del Centre for Investigative Journalism de Reino Unido, considera que las herramientas deben responder a la historia, no la historia a las herramientas. Y por esto mismo, propone tener en cuenta las siguientes pautas antes de iniciar cualquier investigación digital:
1. La ética
Las herramientas no son neutrales, pues responden a investigaciones que afectan a las personas. Por ello, tener claridad frente a la ética periodística es clave. Es importante saber plenamente qué es lo que se está cubriendo, el enfoque de la historia y su alcance. Actualmente, es cada vez más común que las investigaciones trabajen con herramientas y componentes digitales que pueden involucrar, entre muchos otros factores, elementos de la Deep Web que pueden acarrear factores antiéticos. Es por esto que tener plena claridad frente al enfoque que estamos teniendo, es esencial a la hora de investigar para no comprometer la esencia de la historia.
2. ¿Quiénes están investigando?
Es también cada vez más común que las investigaciones no sean hechas, en su totalidad, por periodistas. Hay actualmente intervenciones desde organizaciones de base, organizaciones de Derechos Humanos, ingenieros, matemáticos e incluso, periodistas ciudadanos. Esta recolección de material y de intervenciones desde múltiples disciplinas puede derivar en una falta de rigor a la que el periodismo debe hacerle frente. No es bueno cerrarse a la idea de que únicamente trabajen periodistas en las investigaciones, pero sí es necesario que, ante todo, prime el rigor y la ética que debe tener el periodismo: “hay una sinergia entre mundos que están en choque. El primer mundo es el periodismo tradicional, el segundo es el periodismo digital de data. En la era digital entran en choque con un hermano incómodo, que es el periodismo ciudadano. Estos mundos están dialogando y deberíamos hacer un maridaje para sacar el mayor provecho de estas propuestas”, asegura Huerta.
3. La evidencia
En un mundo con deepfakes e información falsa, es importante poner mucha atención para saber lo que es verdadero, lo que es auténtico. En el ejercicio del periodismo y las investigaciones digitales, no dejarse arrastrar por evidencias falsas es muy importante. Por ello, es necesario tener en cuenta la verificación de los datos y la autenticación de los mismos, y así no caer en la posibilidad de difundir información que no esté totalmente contrastada y certificada.
Pautas adicionales de María Teresa Ronderos
¿Qué nos cambió del periodismo y qué sigue igual? Para Ronderos, el sacudón digital cambió profundamente la manera de pensar, investigar y narrar el periodismo: “antes el periodismo era el gran mediador de las conversaciones públicas. Ahora es una voz más. El mundo se le escapó al periodismo y eso es difícil de pensar”, asegura.
Es por esto que para ella es importante repensar los nuevos retos que acarrea y verlos siempre desde las nuevas preguntas éticas que trae consigo. Así como Huerta, Ronderos considera que las prácticas de rigurosidad deben conservarse para alcanzar investigaciones significativas en un mundo digital: “la sociedad sigue necesitando alguien que le haga curaduría al conocimiento colectivo. Que ordene y alimente con información difícil todos los días a su comunidad y le construya un sentido colectivo”.
Sobre Irving Huerta
Periodista y académico de México y Gran Bretaña. Ha trabajado en investigaciones sobre corrupción, violencia estatal y medio ambiente en América Latina, en medios como Aristegui Noticias y en organizaciones investigativas como Forensic Architecture. Coautor del libro ‘La casa blanca de Peña Nieto’ (Random House, 2015). Es doctor en política por la Universidad de Goldsmiths de Londres, es miembro de la mesa editorial de CONNECTAS e instructor del Centre for Investigative Journalism de Reino Unido.
Sobre María Teresa Ronderos
Directora de CLIP (Centro Iberoamericano de Investigación Periodística). Periodista investigativa colombiana, columnista del diario El Espectador y miembro del Consejo Rector de la Fundación Gabo.
Ronderos publicó el libro Guerras Recicladas (Random House, 2014), una investigación de largo aliento sobre el fenómeno paramilitar en Colombia, que se volvió un ‘best seller’ y le valió el Premio Simón Bolívar Periodista del Año. Este fue su cuarto libro después de dos de perfiles: Retratos del Poder (2002) y 5 en Humor (2007).
Ha sido emprendedora de nuevos proyectos digitales, entre ellos, VerdadAbierta.com, Votebien.com y LaNota.com. Sus reportajes en profundidad le han valido varios reconocimientos, entre ellos el Premio Rey de España, el Lorenzo Natali de la Unión Europea por cobertura en Derechos Humanos y finalista del Premio Ipys-Tilac a las mejores investigaciones latinoamericanas en tres ocasiones. Por su destacada carrera periodística, recibió el Premio Maria Moors Cabot en 2007; en 2020 fue distinguida, junto a un equipo de 16 periodistas de distintos países, con el Premio Ortega y Gasset en la categoría de Mejor Historia o Investigación Periodística.
Sobre el taller ‘Investigaciones digitales: ética, metodología y herramientas’
Este taller, convocado por la Fundación Gabo en alianza con el Centre for Investigative Journalism (CIJ) y el Centro Latinoamericano de Periodismo de Investigación (CLIP), reunió del 9 al 13 de agosto de 2021, de forma virtual, a 12 periodistas interesados en fortalecer sus capacidades y en obtener herramientas para desarrollar investigaciones periodísticas en soportes digitales.