El proyecto busca crear una narrativa innovadora con contenido cultural adaptado al formato de WhatsApp, pero su éxito resultó ir en contra de las políticas de la popular aplicación de mensajería instantánea.
Ante la imposibilidad de salir a las calles por la pandemia, uno de los programas comunitarios de El Pitazo se refugió en la plataforma de mensajería para preservar la cercanía con su audiencia, al tiempo que genera tráfico y contenido para su sitio principal.
Estos son algunos de los principales argumentos expuestos en el taller, con los que Cortés explicó por qué el problema no es tan sencillo de resolver.
Debatamos en Twitter usando #ÉticaEnRed.
WhastApp nos ha simplificado la vida en muchos aspectos, pero también ha reducido los límites de nuestra privacidad.
¿Es ético publicar conversaciones de un grupo de Whatsapp? ¿En qué momento un chat de Whatsapp puede ser considerado de interés público? ¿Violan el derecho a la intimidad los medios que revelan un chat de Whatsapp?
En abril gran escándalo político causó una publicación en el norte de Chile. El diario Boyaldia.cl difundía una información bajo el título “IquiqueLeaks: Whatsapp de la Intendencia “descuera” a gran parte del espectro político de Tarapacá”.
Hoy en día cualquier usuario con canales como Twitter o WhatsApp, es capaz de “golpear” con una información exclusiva a los grandes medios de comunicación.
Ante todo es útil tener en cuenta las alteraciones que la tecnología digital ha introducido en las aplicaciones de lo íntimo y en el derecho de propiedad intelectual.
Los dilemas éticos son los mismos, ha cambiado su frecuencia e intensidad. Esto significa que internet, al aumentar el poder de quien comunica ha intensificado su responsabilidad; al multiplicar y potenciar las herramientas de trabajo, ha hecho más fuerte el deber de llevar a cabo las posibilidades de cada uno.
El diario brasileño Extra lanzó la Rede Narcosul (Red Narcosur), una red de colaboración entre los reporteros que cubren el crimen organizado en América Latina.