Sucedió luego de la difícil victoria 1-0 como locales, conseguida por el onceno colombiano ante Bolivia el día anterior, por las Eliminatorias Conmebol al Mundial de Rusia 2018.
De acuerdo a analistas deportivos, el gesto de James era un reflejo de la molestia que existía al interior del combinado nacional hacia la prensa, debido a las críticas que suscitó la convocatoria del lateral Pablo Armero.
Armero tuvo que ser llevado ante las autoridades de los Estados Unidos hace nueve meses, luego de que al parecer hubiera agredido a su esposa cuando se encontraban en el hotel donde el equipo descansaba en medio de su participación en la Copa América 2016.
Debido a este episodio de violencia intrafamiliar, distintos sectores de la prensa criticaron la convocatoria de Armero, al considerarla una afrenta contra las mujeres.
La polémica se ha aplacado luego de la victoria de Colombia 2-0 frente a Ecuador, justo al día siguiente de la publicación de la polémica fotografía de James Rodríguez. Pero no queremos dejar pasar el incidente, sin aprovecharlo para debatir sobre el rol de la prensa deportiva ante este tipo de situaciones.
¿Estuvo mal prestarle tanta atención en los medios a la fotografía de James haciendo un gesto obsceno? ¿Cómo debe reaccionar la prensa deportiva cuando un ídolo se pone en contra suya? ¿Una reacción inadecuada podría desencadenar reacciones violentas de los aficionados? ¿Es deber de la prensa contribuir a que el deporte una, en lugar de dividir a un país? ¿Debería la prensa exigir disculpas del deportista que se comporta groseramente hacia un periodista?
Para responder a estas y otras preguntas, los seguidores de la cuenta @EticaSegura participaron en uno más de nuestros tuitdebates usando la etiqueta #ÉticaEnRed. Los mejores trinos producidos durante la hora del debate fueron recopilados en el siguiente Momento de Twitter.