La Beca Michael Jacobs, que llega a su sexta edición con el propósito de incentivar la crónica viajera, premiará con 7.500 dólares un proyecto de libro o artículo de viajes sobre Hispanoamérica o España, a publicarse en español o inglés. Postula hasta el 9 de diciembre.
Para elegir al ganador, los jurados tendrán en cuenta la calidad narrativa y la profundidad periodística de los proyectos. Para Michael Jacobs el periodismo de viajes iba más allá de la simple experiencia anecdótica y por ello se buscan trabajos capaces de despertar los cinco sentidos y que le abran la mente a cualquier lector.
Para inspirarte a presentar tu proyecto de crónica viajera a la convocatoria te compartimos seis reflexiones sobre crónica viajera de Santiago Gamboa, viajero compulsivo, escritor y periodista autor de libros de viajes como Octubre en Pekín, Océanos de arena y Ciudades al final de la noche, que compartió durante el Hay Festival Cartagena 2019 y el Festival Gabo 2018.
1. Un diario en movimiento
“En lo personal tengo una predilección por las crónicas viajeras. Son la expresión de una persona, de un escritor en medio de un lugar, conociéndose un poco mejor a sí mismo. Una crónica de viajes es un diario íntimo, pero es un diario en movimiento”.
2. El resultado de una transformación
“Un autor fundamental es uno de esos norteamericanos perdidos en Tánger en los ‘50: Paul Bowles, que era un gran viajero. Bowles decía una cosa en uno de sus libros que para mí es muy reveladora. Cuando uno llega a un lugar porque está escribiendo, y ese lugar es nuevo, inmediatamente se da un proceso de confrontación entre esa persona que llega con sus vivencias, con sus obsesiones, con sus problemas, probablemente con su soledad, con sus manías y se encuentra con otro lugar: con un lugar nuevo. Y ese choque, que puede ser brutal o puede ser amable, produce una transformación en la persona. Entonces el libro, la crónica de viajes es necesariamente el resultado de esa transformación”.
3. Movimiento para explicar una idea
“Una de las grandes plumas, en mi opinión, de la crónica de viaje en América Latina es Martín Caparrós. Libros como Una luna o inclusive El hambre nos van informando con el foco del viaje, nos van llevando los países de África, de Asia, de América Latina, las plantaciones de soya de Argentina, los mercados bursátiles de la agricultura de los Estados Unidos. Es decir, el movimiento que nos lleva de un lugar a otro con una idea explicativa es lo que está en el centro de la escritura de viajes”.
4. El viaje no hace la historia, sino el escritor
“A mí me gusta viajar con libros de viajeros que han estado en esos lugares. Caparrós tiene una frase genial en un libro: él va caminando por un pueblo de África y de pronto dice que quiere contar que no pudo caminar por la calle. Lo cuenta: “un blanco en un pueblo de África caminando es una anomalía”. Cada centímetro había una persona ofreciéndole transporte, taxi, bicicleta. Es, evidentemente, el yo donde se cuenta todo. Lo que hace bueno a un libro o a un texto no es el lugar ni lo que está pasando; es quien lo está mirando.
5. La distancia del viaje no es lo que valoriza a la crónica
Una vez un muchacho me decía “a mi me encantaría escribir pero yo no tengo plata”. Yo le decía que todos los que hacemos esto, lo hacemos como trabajo. La distancia no es relevante. Tú puedes ir a a Choachí desde Bogotá, y a lo mejor Choachí es el sueño de un escritor australiano. No es la distancia lo que hace que el libro tenga un valor distinto, superior, porque cualquier historia de un lugar con algo curioso es maravillosa.
6. Lo más importante: sensibilidad y generosidad
Yo no pienso que haya que haber nacido mirando por la ventana un lugar para ser el único que puede escribir sobre un lugar. Se puede ir a un lugar cinco días y, teniendo sensibilidad y teniendo herramientas como saber escuchar, saber hacer descripciones, saber mirar, acercarse a las cosas con una cierta generosidad, también se pueden hacer buenos textos.
Sobre la Beca Michael Jacobs de crónica viajera 2020
En 2014, tras el fallecimiento de Michael Jacobs, la Fundación Gabo y el Hay Festival Cartagena de Indias, como parte de una alianza de más de una década, tomaron la iniciativa de organizar, como homenaje al escritor inglés, la Beca Michael Jacobs de crónica viajera, reconocimiento que este año cuenta con el apoyo de The Michael Jacobs Foundation for Travel Writing.
La Beca, que llega a su sexta edición con el propósito de incentivar la crónica viajera, premiará con 7.500 dólares un proyecto de libro o artículo de viajes sobre Hispanoamérica o España, a publicarse en español o inglés. Las postulaciones están abiertas hasta el 9 de diciembre de 2019.