El último día del 'Taller de crónicas del barrio Nelson Mandela' fue el punto álgido a una intensa semana. 14 periodistas llegaban con grandes historias bajo el brazo después de varios días de reportería. Desde las 9 de la mañana hasta las 4 de la tarde Jon Lee Anderson fue diseccionando cada texto sin piedad pero con un entusiasmo didáctico, que terminó en lección magistral. Adolfo Ochoa, por ejemplo, escribió sobre los futbolistas que iban a ser Messi pero nunca salieron del barrio. Gabriel Díaz contó la vida de una mujer que huyó de la violencia de la guerra. Joseph Zárate fue la sombra de Kissinger, el cantante de moda que ahorra para un pastel de cumpleaños. Juan Camilo Maldonado nos dio un vibrante revolcón por los 'picós' champeteros. Paula Scarpin se sumergió en el mundo de los reinado de belleza. César Castro investigó las pandillas en este barrio duro levantado por víctimas de la violencia y Ana Paula Tovar descubrió a las mujeres que van de funeral en funeral llorando a cambio de unas monedas o una arepa. Uno a uno Jon Lee Anderson resaltó las fortalezas y debilidades de los textos escritos a la carrera y sin horas de sueño pero que incluyeron entradillas geniales y descripciones físicas de gran nivel. El periodista de The New Yorker orientó a los alumnos sobre estructuras narrativas, el anclaje de los textos, la fuerza de los protagonistas o las transiciones entre ideas. Los textos definitivos se leyeron uno a uno de forma colectiva no sólo por Jon Lee Anderson, sino por gran parte de la FNPI, incluido Ricardo Corredor, director ejecutivo y Julio Castillo de la Fundación Tenaris Tubocaribe. Para el recuerdo quedan la clase de Jon Lee y una rica selección de perlas de los talleristas. La brillante entrada 'garciamarquiana' de Ivvone Toro, la "mujer botero" de Elsa Cabria, el pandillero que citaba a Locke de Teresita Goyeneche, la valiente escolta de Airam Fernández o la historia de amor que encontró Rodrigo Pedroso. Carlos Serrano logró que nos interesáramos por el 'fandub' y el joven que trabaja para Discovery Channel entre las 'casas de cartón'. Las geniales fotos de Natalia Pérez y Joaquín Sarmiento fueron el contrapunto perfecto a tanta letra. Del taller quedan varias conclusiones. Destaca la buena calidad de los textos entregados por talleristas llegados de Uruguay, España, Brasil, México, Colombia, El Salvador, Venezuela, Perú o Chile y el acierto de trabajar en un lugar como Nelson Mandela. Si el primer día el barrio era una fotografía polvorienta y sepia de 45.000 habitantes, alejada de la Cartagena bonita, una semana después se reveló como una mina de historias de superación, esperanza, miedo, violencia y carencias. La sensación de que las buenas historias están a la vuelta de la esquina. El punto y final lo puso Barranquilla, las marimondas y la aparición estelar de Brian Eno. Aunque eso es otro taller. Este terminó en el autobús Cartagena Barranquilla, donde se siguió hablando de periodismo con Jon Lee Anderson micrófono en mano. Las crónicas elaboradas por los talleristas estarán disponibles próximamente en el sitio web de la FNPI.