En sus cinco ediciones, la Beca Gabriel García Márquez de periodismo cultural ha reunido en el Caribe colombiano a reporteros de 30 países en torno a temas como la literatura, la música o la cultura popular. Bajo la guía de Héctor Feliciano, Jonathan Levi y otros maestros del periodismo y la cultura, 80 periodistas han explorado este rincón del mundo que alimentó la obra literaria y periodística de Gabo.
Algunos becarios nos contaron cómo recuerdan esta experiencia y por qué vale la pena participar.
La convocatoria para la edición de 2018 ya está abierta. En esta ocasión, el evento que convocará a 15 periodistas que publiquen en inglés o español será el Festival Internacional de Cine de Cartagena de Indias. Postula aquí.
Santiago Wills (Colombia), Beca Gabo 2015
Colabora con Etiqueta Negra, Gatopardo, Vice, El Espectador, SoHo, entre otros.
Por qué valió la pena participar en la Beca Gabo:
¿Por qué valió la pena participar en la Beca Gabo? Me cuesta ponerlo en palabras, pues hay algo inefable en la reunión de tantas personas con diferentes perspectivas, puntos de vista y culturas. Eso, sin duda, es una oportunidad que no debe tomarse a la ligera. A lo anterior, además, debe sumarse la posibilidad de viajar por el Caribe colombiano y trabajar una historia de la mano de maestros como Jonathan Levi, Roberto Pires y Héctor Feliciano. Esa clase de privilegios son los que permanecen.
La lección más valiosa de la Beca:
Hay diferentes tipos de escritura para diversos tipos de notas periodísticas. No obstante, sin importar qué tipo de periodismo se persiga, nunca se debe dejar de prestar atención al detalle, nunca se debe dejar de buscar aquel hecho capaz de iluminar las historias. Esa fue, sin duda, la lección más valiosa que me dejaron tanto mis profesores como mis compañeros en la Beca Gabo.
Cómo aplica las lecciones de la Beca en su trabajo diario:
Las lecciones de la Beca me acompañan cada vez que salgo a hacer reportería. En ese momento, cuando estoy lejos de mi casa, libreta en mano, siento como si me convirtiera en otra persona. Dejo de tener la mirada que normalmente utilizo en el día a día. Los objetos saltan, me llaman y presto atención a cada gesto, cada cambio de tono y cada palabra de las personas a las que entrevisto o perfilo. Ese alter ego se consolidó durante la Beca gracias a los comentarios de Jonathan, Héctor, Roberto y mis compañeros.
Emiliano Ruiz Parra (México), Beca Gabo 2013
-Colabora para la Revista Gatopardo
Por qué valió la pena participar en la Beca Gabo
Porque nos encontramos periodistas de África, Europa y América Latina en el Caribe colombiano para cubrir el Hay Festival de Cartagena y los preparativos del carnaval de Barranquilla; reporteábamos y asistíamos a talleres con fantásticos maestros como Jonathan Levi, Héctor Feliciano, Salcedo Ramos, Francine Prose y Mario Jursich. Entre el contingente de latinoamericanos, el más numeroso, se mezclaban musulmanes de África, colegas de los Balcanes, periodistas de Estados Unidos. Sin duda que la posibilidad de entrevistar a Vargas Llosa, Cercas o Padura fue un gran atractivo, pero el mejor aprendizaje viene de esa tribu temporal que se forma de periodistas jóvenes que confraternizan con ron y cerveza, se muestran sus mundos, sus estilos y sus sueños.
La lección más valiosa de la Beca
Me deslumbró la escritura de Abubakar Ibrahim, colega nigeriano; la lectura aguda de Levi de nuestros textos, la velada con Padura también en casa de Levi, el sentido del humor de Salcedo Ramos, acaso el mejor cronista del idioma.
Cómo aplica las lecciones de la Beca en su trabajo diario:
Todo mi trabajo se ha beneficiado de esas lecciones.
Nathalie Iriarte (Bolivia), Beca Gabo 2017
-Freelance, colabora con Connectas
Por qué valió la pena participar en la Beca Gabo:
Porque tuvimos la oportunidad única de recorrer el Caribe colombiano siguiendo los pasos de Gabo junto a amigos y colegas suyos. Los maravillosos maestros de la Beca nos fueron guiando en un proceso creativo/editorial apasionado, exigente y lleno de distintas miradas que enriquecieron nuestras historias.
La lección más valiosa de la Beca:
Que los textos inolvidables no son inspiración divina sino trabajo duro de horas y horas de escribir, re escribir, re escribir, y volver a re escribir.
Cómo aplica las lecciones de la Beca en su trabajo diario:
Trato de mirar cada historia con distintas perspectivas para encontrar desde dónde contarla. Recordar los ángulos propuestos por los maestros (casi siempre muy contrapuestos entre sí) me hace buscar nuevas formas de plantear las historias que trabajo. Además, trato de compartir todo lo aprendido en los talleres y clases que imparto.
Rafael González (Cuba), Beca Gabo 2017
-Trabaja en Cachivache Media
Por qué valió la pena la Beca Gabo:
La Beca Gabo es una experiencia única, la oportunidad de compartir con destacados profesionales de América Latina y el resto del mundo. Es la posibilidad de estar en contacto con una realidad que te es ajena, que te desborda, es el reto de adaptarte a esa realidad y narrarla, a la par que te retroalimentas del intercambio con las miradas diversas de un grupo de periodistas muy talentosos. Creo que hay pocas experiencias similares en la vida.
La lección más valiosa de la Beca:
Como ejercicio de escritura y edición es invaluable, significa tener el lujo de trabajar con extraordinarios periodistas y editores que casi nunca están al alcance de la mano, ensayando una escritura bajo presión que termina sacando lo mejor de ti y aguzando tus sentidos de manera especial. Probablemente no pueda (ni quiera) escribir de esa manera a menudo, pero probablemente no me vuelva a sentir más estimulado y retado que en esos días.
Cómo aplica las lecciones de la Beca en su trabajo diario:
Como editor amplió mi capacidad de entender la pluralidad de puntos vista de los periodistas, así como "heredé" herramientas de mis editores en la Beca que aplico a mi trabajo. Como escritor me obligó a ponerme en otras pieles, a ser más asertivo con los comentarios y sugerencias de otros, y a tratar de editorializar menos, que dicen que es el mal compartido de los periodistas cubanos cuando vamos a contar una historia; concentrarme en describir los entornos, en dejar que sean los protagonistas quienes expliquen los fenómenos, ese creo que fue mi mayor aprendizaje.
Salym Fayad (Colombia)
-Colaborador de la Revista Arcadia
Por qué valió la pena la Beca Gabo:
Durante la beca de 2016 trabajamos el tema de la conexión cultural entre África y el Caribe. Es un tema recurrente en la narrativa cultural colombiana actual, pero siento que en raras ocasiones se le trata con la profundidad y la complejidad que merece. Al llevar diez años trabajando y viviendo en África, para mí fue una oportunidad excepcional haber podido compartir impresiones y mantener debates culturales profundos con un grupo que incluía a periodistas colombianos y de diferentes países africanos.
La lección más valiosa de la Beca:
Por la enorme riqueza que fue conocer, interactuar, compartir los proyectos y las experiencias individuales de cada uno con los maestros, pero más aún con los demás becarios. Los miembros del grupo venían de lugares y contextos muy diversos, y fue muy enriquecedor poder ver de primera mano cómo cada persona, desde su propia perspectiva cultural, se aproximaba a un tema cultural en el Caribe que en muchos casos le era totalmente ajeno.
Cómo aplica las lecciones de la Beca en su trabajo diario:
En ser consciente de las diversas formas de narrar sobre un mismo tema. Durante la beca era habitual que varios de los becarios trabajaban un mismo tema, o una historia similar. Sin embargo, el ángulo con el que cada uno se aproximaba al tema era totalmente distinto, así como la forma y las herramientas que usaban para escribir sobre ese tema en particular. Esto es algo que intento aplicar en mi propio trabajo, ya que con alguna frecuencia las historias que se cuentan desde naciones africanas ya han sido tratadas por otros medios o periodistas; y lastimosamente, en muchas ocasiones estas historias son abordadas de manera muy superficial que termina simplificando historias muy complejas.
Ana Pais (Uruguay), Beca Gabo 2016
- Periodista de BBC Mundo.
Por qué valió la pena participar en la Beca Gabo:
Comenzar la jornada con un documento en blanco es un desafío con el cual muchos periodistas nos enfrentamos a diario. En ese constante renacer (y morir) no siempre tenemos tiempo para detenernos a pensar si elegimos la mejor forma de comenzar nuestra historia, de presentar a los protagonistas, de plantear el formato.
La Beca Gabo es una instancia casi única para que un equipo de distinguidos profesionales y talentosos colegas vayan leyendo tu texto y guiándote para mejorarlo mientras evoluciona día tras día. Esta experiencia, repleta de frustraciones y emoción, ayuda a renovar la autoconciencia al momento de tomar decisiones editoriales y narrativas. Y junto con ello, a renovar el amor hacia el periodismo.
La lección más valiosa de la Beca:
Tratar de salir de mi zona de confort narrativa y de las fórmulas de escritura preestablecidas. Para ello, nada mejor que leer ficción y, sobre todo, en la propia lengua, para dejarnos inspirar por otras estructuras o estrategias más artísticas, pero que, bien aplicadas, pueden ser herramientas valiosas de comunicación.
Cómo aplica las lecciones de la Beca en su trabajo diario:
El periodismo tiene como principal misión informar, pero eso no elimina la posibilidad de emocionar e inspirar. La Beca Gabo redobló mi deseo de intentar crear pequeñas piezas de literatura informativa, que den al lector mucho más que una serie de datos relevantes. En su belleza y originalidad, cada texto tiene el desafío de remover la indiferencia y generar vértigo en el lector.
Sobre la Beca Gabo
La sexta edición de la Beca Gabriel García Márquez de Periodismo Cultural es organizada por la FNPI- Fundación Gabriel García Márquez para el Nuevo Periodismo Iberoamericano, el Ministerio de Cultura de Colombia y Cartago Foundation, con el apoyo del Festival Internacional de Cine de Cartagena de Indias -Ficci, y el Centro de Formación de la Cooperación Española. Encuentra aquí todos los materiales de las 5 ediciones anteriores de la Beca Gabo.