Se llama Fake It To Make It (Falsifícalo Para Lograrlo), y fue creado por Amanda Warner, una diseñadora multimedia preocupada por las causas sociales.
Se trata del primer videojuego (disponible por ahora solo en inglés) que le permite al usuario ponerse en los zapatos de un creador de noticias falsas, para entender así cómo funciona el negocio de la desinformación en internet.
“Espero poder ayudar a los jugadores a estár más atentos a cómo se escriben y distribuyen las noticias falsas, de tal forma que sean más escépticos respecto a lo que encuentren en el futuro. En general, creo que entender mejor cómo somos manipulados por los demás, ya sea por motivos económicos o políticos, es un conocimiento que vale la pena tener”, afirma Warner.
El videojuego primero invita al usuario a crear un personaje, ya sea un hombre o una mujer, que tiene una de tres aspiraciones: comprar instrumentos para su banda de rock, comprar un apartamento o un auto usado.
Luego, el usuario debe crear su sitio web de noticias falsas, permitiéndole elegir el nombre de dominio, logo y forma de monetización.
El tercer paso es crear el contenido. El usuario puede simplemente copiar y pegar otros artículos disponibles, o crear sus propios textos.
Tras crear o copiar estas primeras noticias falsas, viene el proceso más interesante de todo el juego: la distribución. Aquí es donde queda en evidencia el poder de las redes sociales, y el rol que especialmente Facebook ha tenido como plataforma de distribución de noticias falsas.
La duración del juego depende de qué tan ambiciosa es la meta que se elija.
El juego de Warner le permite al usuario entrar en contacto con los administradores de comunidades o grupos cerrados en redes sociales, los cuales le venden la posibilidad de publicar ellos mismos estas noticias falsas, de tal forma que tengan mayor grado de credibilidad.
Al hacerlo, el jugador puede experimentar cómo, dependiendo del tipo de artículo y orientación temática del grupo que haya elegido para plantarlo, este se va viralizando y generando numerosos comentarios de odio o sorpresa entre los integrantes de la comunidad en la que fue expuesto.
Finalmente, el usuario podrá crear varios sitios dedicados a divulgar noticias falsas, y comprobará cómo sus fondos van aumentando a medida que la información que difunde gana viralidad y “credibilidad” entre las desinformadas comunidades en las que distribuye sus historias.
“El proceso de creación de las noticias falsas está ya bien documentado en distintos sitios de internet. Si alguien quiere meterse en el negocio, hay abundante información para hacerlo”, responde Warner cuando se le pregunta sobre la posibilidad de que alguien use su juego para el malévolo propósito de convertirse en un empresario de la desinformación. “Pero creo que hay una gran diferencia entre la información y la inspiración. Es posible que este juego aliente a algunos a entrar en el negocio de las noticias falsas, pero estoy más convencida del potencial impacto positivo que esto tendrá en los jugadores”, añade.
Para aquellos interesados en aprender más sobre cómo identificar noticias falsas, Warner recomienda visitar sitios como Snopes, Politifact, y FactCheck.org, los cuales se han especializado en la tarea de desmentir bulos.
Si usted es una persona que comparte la preocupación de Amanda Warner respecto a las noticias falsas, seguro encontrará interesantes nuestros quizes semanales, y el grupo de Facebook Esta Noticia Es Falsa, que hemos creado para ayudar a los periodistas a evitar ser engañados.