Introducción
El pasado 12 y 13 de agosto, en la Casa Surtigás, del barrio El Cabrero, el periodista e investigador, Gideon Lichfield (Reino Unido); el profesor de Periodismo en la Universidad de Navarra, Ramón Salaverría (España) y el maestro Germán Rey (Colombia), conformaron el grupo de jurados encargados de elegir el trabajo ganador en la categoría de Innovación de la versión 2016 del Premio Gabriel García Márquez de Periodismo.
Después de una reunión general con los jurados responsables de la tercera ronda de juzgamiento del Premio en las categorías Texto, Cobertura e Imagen; Lichfield, Salaverría y Rey revisaron los criterios de la organización del concurso que se realiza anualmente y concertaron la revisión individual de los 25 trabajos que llegaron a la fase final.
Una vez terminada la revisión, los maestros procedieron a la escogencia de la selección Oficial, para posteriormente determinar el ganador del Premio y los dos finalistas.
Palabras Clave: Innovación, periodismo de datos, investigación, impacto social, excelencia, rigurosidad.
Ante todo, un premio al periodismo
Para dar inicio a la sesión de juzgamiento y aclarando un poco las dudas que pudieran surgir durante las misma, Germán Rey, profesor universitario, relator de congresos y seminarios y escritor de varios libros, les propuso a sus compañeros un poco de flexibilidad en la selección general, teniendo en cuenta la extensión de algunos trabajos, el medio de comunicación que los postuló y las condiciones en las que se realizó el mismo, para finalmente evaluar rigurosamente cuales serían escogidos como finalistas.
Habiendo evaluado previamente los 25 trabajos que hicieron parte de la ronda final de juzgamiento, los jurados dialogaron acerca de la “línea artística” de varias de las piezas postuladas este año al concurso y cómo eso, de alguna manera, las hacía resaltar entre el grupo finalista.
Sobre este punto Rey, manifestó que si bien podrían considerarse temas como la extensión de algunas publicaciones respecto a otras de la misma categoría, sí se hacía necesario recordar que, en esta oportunidad, la Fundación le otorga un premio al periodismo, a trabajos que “tecnológicamente podrían no ser muy avanzados, pero que socialmente sean muy significativos”.
En ese sentido, Salaverría agregó que al tratarse de un premio iberoamericano también era necesario determinar una escala, dada la existencia de trabajos claramente innovadores para su entorno territorial más próximo, pero no tanto a nivel regional.
“Mi impresión es que si bien entre los 25 trabajos hay unas pocas postulaciones cuyo fundamento es la innovación tecnológica o de formato, en general, lo que he visto es un enfoque distinto. Un uso de la tecnología existente. Un uso excelente de las narrativas. En ese sentido el premio no va a descubrir formas radicalmente nuevas sino que, más bien, va a ser una especie de escaparate de formas excelentes de mostrar la información con las tecnologías existentes”, anotó Ramón Salaverría.
Acerca del mensaje que el equipo de jurados buscaba dar en esta oportunidad, Gideon Lichfield consideró que era importante rescatar que el trabajo merecedor del Premio se tradujera en algo que cualquier buen periodista pudiera hacer, que señalara una “fresca mirada y una manera de captar la atención del usuario”.
Predominó el periodismo de datos
Después de una detallada revisión de los 25 trabajos que fueron seleccionados para llegar a la ronde final, los jurados dieron sus impresiones personales acerca de sus hallazgos. Los tres estuvieron de acuerdo en que en esta versión se destacaban dos grandes subcategorías dentro de postulaciones al premio de innovación.
Por un lado, el periodismo de datos y la diversidad en los formatos, llamó la atención de los maestros a cargo del juzgamiento, quienes acotaron que también era muy evidente la diferencia entre los trabajos hechos por un solo periodista y los elaborados por grandes equipos, dotados de los mejores equipos tecnológicos.
De acuerdo en que cada jurado postulara las 10 piezas más destacadas dentro de la selección, German Rey, Ramón Salaverría y Gideon Lichfield iniciaron un análisis conjunto de dichas postulaciones para llegar a la selección Oficial de la categoría de Innovación.
Empezando con Medicamentalia, trabajo español, postulado por Eva Belmonte, Miguel Ángel Gavilanes, David Cabo Calderón, Raúl Díaz Poblete y Antonio Villarreal, el jurado anotó que este era “un excelente trabajo, con una información de suma importancia que fue puesta al servicio de la comunidad mediante un lenguaje accesible”.
Ramón Salaverría manifestó que “Medicamentalia cumple sobradamente con los requisitos para ser un trabajo premiado y supera las limitaciones que muchas veces presentan los trabajos de periodismo de datos y es que sitúan el esfuerzo de la interpretación en el lector y el trabajo periodístico no es materia prima en bruto, te debe mostrar un desarrollo, un contexto, una investigación. El contenido es difícil de localizar y el marco de la investigación es muy grande, prácticamente global. Tenemos aquí países en los que es muy difícil acceder a los datos y esto se ha realizado de manera concienzuda (…) La plasmación grafica es impecable, la factura técnica es original en la representación y dicho todo eso te cuenta una historia. Me parece que hay un perfil periodístico neto. Por todas estas razones, para mí es uno de los mejores. Es denuncia social basada en los datos”.
Para Gideon Lichfield, quien se desempeñó como investigador adjunto del Data & Society Research Institute, en Nueva York, Medicamentalia señala las comparaciones y sitúa los precios de los medicamentos de manera bien hecha. Sin embargo, consideró que el trabajo debió explicar además por qué entonces se paga tanto más por medicamentos en unos países en comparación con otros, “¿quién es el culpable en esta diferencia de precios? Para mí habría un paso más, sin embargo eso no quita la calidad del trabajo y ellos decidieron llegar hasta ese punto”.
En defensa de la crítica hecha por Lichfield, German Rey anotó que el debate sobre el sobrecosto de los medicamentos “remite a otros problemas gruesos. Hubiera sido interesante, pero es bastante complejo por los elementos del debate contenidos en los tratados internacionales, laboratorios y empresas farmacéuticas”. Rey resaltó la buena estructura de los contenidos, la presentación, la calidad de las estadísticas y el análisis periodístico, categorizando a Medicamentalia desde el primer momento como un candidato muy fuerte dentro de la competencia.
La evauación continuó con el trabajo mexicano Méxicoleaks, postulado por los equipos de Animal Político, Aristegui Noticias, Más de 131, Pie de Página, Proceso y RindeCuentas.org. Lichfield destacó el trabajo conjunto de los medios de comunicación vinculados al proyecto y el uso del modelo “Wikileaks”. Por otra parte, el jurado se preguntó acerca del impacto que han tenido las historias publicadas en la plataforma, dado que para él no quedaba claro, en el momento de leer los reportajes, qué información fue captada directamente de la plataforma.
Por su parte, Salaverría resaltó el trabajo colaborativo de un grupo de periodistas, teniendo en cuenta el contexto hostil en el que se desenvuelve su país, lo cual apoyó el maestro Germán Rey, agregando que Méxicoleaks muestra una alternativa tecnológica para enfrentar poderes corporativizados y crimen organizado, que en cualquier país tendrá valor, pero más aún en México.
“Crimen organizado, corrupción y policía. Es bueno que el periodismo se pregunte cómo enfrentar estas alianzas tan terribles. Es una nueva forma de enfrentar la investigación periodística. Qué tipo de información se filtra y qué impacto tiene esta en la realidad mexicana”, argumentó Germán Reyes.
Avanzando en la discusión, Germán Rey propuso el análisis del trabajo peruano Excesos sin castigo, de Convoca.pe. Una investigación profunda sobre un tema que, a su parecer, se sale de las proporciones en América Latina por tocar temas concernientes al medio ambiente, la corrupción, política y mafias regionales que se han convertido en un problema para el continente.
“Me llama la atención la metodología. Hay una búsqueda de información original, más de 100 requerimientos al Estado y en temas tan opacos de los que no se quiere dar esa información; después procesar esos pedidos es relevante. Tenemos aquí la revisión de más de 20 mil páginas y resoluciones, eso es muy importante. Creo que hay un muy buen trabajo”, sostuvo Rey.
Siguiendo la misma línea, Gideon Lichfield, subrayó que “hacer una investigación tan a fondo, sobre una industria tan poderosa en un país como Perú, es un paso importantísimo para el periodismo. El peso de la investigación es enorme y me gusta que en la página principal tienen entrada a las App, visualización de datos y después está la sección de hallazgos. Señalan muy claramente dónde habría que investigar más, eso me gusta”.
Por su parte, Ramón Salaverría les compartió a sus compañeros que “al analizar este trabajo he visto bastantes denominadores comunes con el trabajo de Medicamentalia. El hecho de hacer una investigación complicada basada en datos, una denuncia. El hecho de haberse zambullido en la investigación de datos, dando el paso periodístico de interpretar esa información, es relevante”.
El siguiente trabajo en la lista de los escogidos de manera unánime por el jurado fue Soy el número 16, de Rafael Pineda y Leopoldo Hernández, periodistas de Pie de Página (México).
Tomar un tema que se ha discutido mucho o del que se puede pensar que hay un amplio conocimiento, fue para Gideon Lichfield, uno de los principales argumentos para que el trabajo mexicano hiciera parte de la Selección Oficial.
“El uso de una técnica sencilla y de baja tecnología se convierte en algo personal que toca de inmediato al espectador y se conecta contigo de manera inmediata haciéndote entender qué es. Se empeña en explicarte una sola cosa, muy sencilla, sin rebasar los límites. Es impactante”, expresó Lichfield.
A su paso, el maestro Salaverría les confesó a sus compañeros que Soy el número 16 había sido la pieza más memorable de todas las que habían llegado a sus manos.
“… De la que me voy a acordar, con toda seguridad, es de esta. Rompió mis expectativas. En esta pieza, tanto en mi obligación como jurado, como de espectador, la habría terminado. Es una historia que es un ejemplo de otras muchas historias que busca la manera idónea para contar aquello que no se puede mostrar, sin caer en el sensacionalismo. No cae en la autocompasión, da cuenta no dramática de cómo van ocurriendo las cosas, y su reflexión final te traslada como consumidor, a que esto no se puede mantener (...) Me parece innovador. Entre los 25 no hay otra igual”, sostuvo Salaverría.
El maestro Rey comentó que recientemente había entregado un informe sobre asesinatos de periodistas en los últimos 40 años y agregó que al ver Soy el número 16 encontró que esta era “una buena manera de contar las cosas, incluso en la humildad técnica, me gustaría revisar si no tenían los medios o tomaron la decisión de hacerlo con pocos medios. En poco tiempo lograron una historia bien contada, más testimonial que dramática y por eso también estaría dentro de las seleccionadas”.
Otra de las 10 piezas seleccionadas por el jurado como parte del grupo de la Selección Oficial fue Retratos de desigualdad, de El Faro (El Salvador), de la que Gideon Lichfield resaltó la técnica del reportaje y el fácil acceso a los datos.
German Rey explicó que el énfasis en los jóvenes había sido de su agrado, así como el abordaje del tema de la violencia haciendo uso de los mapas de desplazamiento urbanos y la metodología de seguimiento, pero lamentó que no se le sacara mayor provecho a la iniciativa.
“Es una magnífica idea con una ejecución incompleta. Es una forma de contar cosas nuevas, distintas, utilizando una estrategia innovadora como una forma de investigación periodística con estrategia de geolocalización. Son 24 casos, un tamaño muestral objetivamente insuficiente. Se puede hablar de testimonios, pero no establecer estadísticas y eso se pudo haber solucionado de alguna manera. Lo he elegido porque es una idea innovadora”, concluyó Ramón.
Desaparecidos, postulado por El Tiempo (Colombia), fue otro de los trabajos sobre los que se discutió en la primera jornada del juzgamiento y del que el jurado comentó que se trata de “una completa investigación periodística, bien planteada, ambiciosa”. Sin embargo, Rey, Salaverría y Lichfield, estuvieron de acuerdo en que hacía falta un poco de ingenio y originalidad: “hacen falta las historias individuales para evitar convertir a las personas en estadísticas”.
A su turno, El patrimonio del gabinete de Evo, de El Deber (Bolivia), fue resaltado por el jurado dentro del grupo de los 25 finalistas como un trabajo de emprendimiento periodístico dentro de su país, al que le resta el análisis de la información que presenta.
La postulación de los colombianos Óscar Parra, Lía Beltrán Valero, Juan Pablo Daza, Alejandro López, Juana Callejas, Luisa Rincón Guzmán y Juan Pablo Gómez, Rutas del conflicto – Yo sobreviví, fue catalogada por los jurados como uno de los sitios más interesantes en la exposición del conflicto, dado que la recopilación de información, los testimonios, la organización de la información lo hacen muy interesante.
“El interface es muy bueno, te da muchos puntos de entrada y esa posibilidad me parece cómoda para los usuarios. Tienes que darle la oportunidad al lector de entrar por diversos puntos. Es un ejemplo de no tener que invertir grandes recursos. Me gusta el uso de los testimonios de los sobrevivientes y cómo esto se mezcla con los datos. Haría falta perfeccionar el sitio para que la gente pueda agregar sus comentarios”, anotó Gideon.
En la apreciación de Ramón, Rutas del conflicto – Yo sobreviví “es una colección de testimonios, pero como trabajo periodístico no me muestra nada. Tengo que llegar a los testimonios para encontrar algo periodísticamente relevante. Falta información de contexto. Falta la fase intermedia de generalización y contextualización”.
Crimen y castigo, de La Silla Vacía (Colombia), sobresalió entre las postulaciones, según el jurado por ser un proyecto de juiciosa investigación que vincula los crímenes que ocurrieron en un sector populoso de la capital colombiana con el castigo en términos de justicia.
“Lograron investigar todos los casos de muerte en el barrio. El mensaje central es la impunidad. Me gustó que haya muchos puntos de entrada, hay monitoreo de cada caso y te cuentan mediante un reportaje o una crónica qué fue lo que pasó. El cruce de datos aporta información diversa”, concluyó el jurado.
Pregoneros de Medellín fue el último trabajo evaluado durante la primera jornada del juzgamiento y sobresalió por tratarse de una manera divertida de hacer periodismo de ciudad, resaltando el valor de personajes como los pregoneros de la capital antioqueña.
De esa manera, los jurados concluyeron su primer encuentro con la Selección Oficial del Premio en la categoría de innovación, integrada por las siguientes piezas:
1. Rutas del Conflicto
2. Medicamentalia
3. Mexicoleaks
4. Pregoneros De Medellín
5. España en Cifras
6. Exceso sin Castigo
7. El Patrimonio Del Gabinete De Evo
8. Soy El Numero 16
9. Retrato De Desigualdad
10. Desaparecidos
Respaldo a las nuevas iniciativas
Abriendo la segunda jornada del proceso de juzgamiento en la categoría de Innovación del Premio Gabriel García Márquez, los jurados de este grupo acordaron tener en cuenta las consideraciones respecto a los trabajos seleccionados hasta la segunda ronda y que por algún motivo no llegaron a fase final.
Fue así como los maestros Rey, Salaverría y Lichfield rescataron el trabajo guatemalteco Los 30 que cuentan, publicado por Nómada, el cual incluyeron en la Selección Oficial como un mensaje positivo para los periodistas que le siguen apostando al trabajo investigativo y colaborativo.
Gideon Lichfield lo definió como “un trabajo estimable considerando el entorno. Si me hubieras preguntado quiénes son los poderosos en Guatemala hubiera pensado que eran políticos y empresarios y esto te muestra una gran mezcla y que el poder va mas allá. Te lleva a una discusión acerca de cómo funciona un país y cómo funciona el poder. Se debe rescatar también que este es un medio joven, con un par de años de vida, por eso que estén entre los diez mejores es un buen respaldo y un reconocimiento a su trabajo”.
De esta manera la Selección Oficial cambió por decisión unánime de los jurados quedando entre los diez mejores trabajos de la categoría Innovación del Premio Gabriel García Márquez: Crimen y castigo, de La Silla Vacía (Colombia); El patrimonio del gabinete de Evo de El Deber (Bolivia); Excesos sin castigo de Convoca.pe (Perú); Los 30 que cuentan de Nómada (Guatemala); Medicamentalia de Civio (España); Méxicoleaks de Animal Político, Aristegui Noticias, Más de 131, Pie de Página, Proceso y RindeCuentas.org. (México); Pregoneros de Medellín de Pregonerosdemedellin.com. (Colombia); Retratos de desigualdad de El Faro (El Salvador); Rutas del conflicto – Yo sobreviví de Rutas del conflicto (Colombia) y Soy el número 16 de Pie de Página (México).
Se premió la excelencia
Teniendo clara la Selección Oficial, los tres jurados estuvieron de acuerdo en la escogencia del trabajo ganador y dos finalistas, siendo la investigación sobre el acceso a los medicamentos en el mundo, Medicamentalia, el merecedor del primer lugar en la categoría Innovación.
“Me parece que es un trabajo completo, excelente en la ideación, en la generación de la idea, la investigación, en la ejecución y en la visualización. Cumple todos los requisitos para una calificación excelente desde el principio hasta el final. La dimensión internacional de la investigación, el carácter crítico de los datos es inmejorable. Destaca por su enorme complejidad, por su tema y dimensión internacional, con un muy estimable impacto social, ya que la falta de transparencia en los precios de los medicamentos influye en toda la sociedad. En lo que respecta al proceso investigativo que implica acceder a bases de datos y hacer un laborioso trabajo de síntesis, así como de interpretación y análisis periodístico. El resultado es un reportaje de extraordinaria claridad para un tema tan complejo”, destacaron los jurados.
Reconocimiento a la creatividad
Como finalista, German Rey, Ramón Salaverría y Gideon Lichfield escogieron Soy el número 16 de México, “una crónica que resalta por la originalidad de su forma expresiva, que recurre al dibujo y a la animación como lenguaje periodístico. No es una elección gratuita, sino justificada por la naturaleza del asunto que se comunica. Resulta meritorio que en situación de escasez de medios materiales se utilicen creativamente estas herramientas. Es un trabajo periodístico de memoria sobre la violencia que se vive hoy en México y que los periodistas también experimentan. Ante la cantidad abrumadora de secuestros que se pueden percibir como manera estadística, permiten al espectador tener una impresión muy directa de la experiencia que sufre cada secuestrado”.
Estudio juicioso y rigurosidad
Excesos sin castigo de Convoca.pe fue el segundo finalista, “una investigación en la que se destaca la revisión de más de 20 mil páginas de informes, estudios y resoluciones sobre la minería ilegal y el centenar de peticiones de información que la autora le hizo al Estado peruano sobre un tema que es crucial en América Latina.
Un trabajo que hace un uso excelente del periodismo de datos, a partir de fondos documentales de difícil acceso y tratamiento y que construye una información de incuestionable valor periodístico. La investigación no se limita a ofrecer datos en bruto sino que presenta de forma clara y definida los hallazgos principales”.
Relatoría del proceso de juzgamiento del Premio Gabriel García Márquez 2016
Categoría:Innovación.
Fecha: 14 y 15 de agosto de 2016.
Lugar: Cartagena, Colombia
Jurados: German Rey (Colombia), Ramón Salaverría (España) y Gideon Lichfield (Reino Unido).
Relatoría de Jessica Ponce Aguirre