A la luz de las velas y con la música y el baile como protagonistas, familiares y amigos homenajearon el sábado, en el Centro de Formación de la Cooperación Española en Cartagena, a Óscar Collazos, fallecido el pasado 17 de mayo. El acto, que se tituló Réquiem entre dos mares, comenzó con la actuación de Ceci Silva, quien acompañada por la agrupación Tambores de Cabildo, interpretó algunos de los bullerengues preferidos del escritor. A continuación, su esposa, Jimena Rojas, dio la bienvenida a los presentes afirmando que era "esa desviación del amor llamada amistad" la que los convocaba, citando al homenajeado. A lo largo del evento representantes de varias instituciones con las que Óscar Collazos colaboró a lo largo de su vida, fueron recordando su papel como escritor, como periodista, como impulsor de la cultura y como ciudadano comprometido con Cartagena, ciudad en la que residió, y con Colombia, país que siempre quiso convertir en "una geografía vivible", tal y como recordaron sus amigos. Jaime Abello Banfi, director de la FNPI, Álvaro Restrepo, director de El Colegio del Cuerpo y Pedro Luis Mogollón director de El Universal, periódico para el que Collazos escribió innumerables columnas de opinión, fueron algunos de los encargados en tomar la palabra y recordar a su colega y amigo. Una alumna de la Universidad Tecnológica de Bolivar retrató al Óscar docente, narrando como siempre recordaba a García Márquez en sus clases, a quien siempre se refería como su amigo "Gabito". El acto también contó con la participación de las compañías de baile El Colegio del Cuerpo y Periferia, y con la actuación de Sandra Alcázar, quien interpretó tres boleros. Finalmente, tras las palabras de agradecimiento de Jimena Rojas, los asistentes despidieron Óscar Collazos bailando salsa, tal y como le hubiera gustado al escritor, quien fue un apasionado de este género musical.