Por Katherine Pennacchio
Todos los esperan. Los tweets y mensajes van y vienen. Las miradas de los asistentes se dirigen a la puerta por la que el rey y la reina de España harán su entrada. No están en su casa, pero el estatus y el protocolo los acompañan a donde quieran que vayan. Esta vez el lugar es San Juan, Puerto Rico, y la ocasión el VII Congreso Internacional de la Lengua Española (CILE) que busca enaltecer el idioma que el Caribe tiene en común con su majestad.
Letizia entra de la mano de su esposo con la frente en alto y luciendo regia. No sonríe. O, al menos, no una sonrisa que no fuese sólo cortes. La seriedad es su bandera de hoy. Lleva un traje de falda color melón y unos zapatos color perla que combinan con su cartera.
En los últimos días, Letizia ha sido blanco de titulares y memes en las redes sociales por una filtración de eldiario.es, medio digital en España, en el que se le adjudican unos mensajes de texto dirigidos al conocido empresario Javier López Madrid, en apoyo luego de destaparse el caso de las tarjetas opacas de Caja Madrid. "Te escribí cuando salió el artículo de lo de las tarjetas en la mierda de LOC y ya sabes lo que pienso Javier. Sabemos quién eres, sabes quiénes somos. Nos conocemos, nos queremos, nos respetamos. Lo demás, merde. Un beso compi yogui (miss you!!!)" rezaba el mensaje de Letizia.
De vuelta al evento que ha sido denominado "la fiesta de la lengua española". El orador principal inicia las ponencias dando la bienvenida y hace hincapié en la importancia de la palabra española como denominador común de nuestros pueblos. Seguidamente, Victor García de la Concha, director del Instituto Cervantes, da un recorrido por lo que han sido los congresos de los años anteriores sin dejar de enaltecer nuevamente el idioma español. Letizia aplaude de manera cortés, pero no sonríe.
Llega el turno de Jorge Edwards, novelista chileno, quien con su edad avanzada, voz pausada y verbo extenso logra cautivar la atención de los oyentes. Entre ellos, a Letizia quien por primera vez, desde el comienzo del evento, muestra una pequeña sonrisa en su rostro. "Debe haber fidelidad, conocimiento y respeto al pasado para no perdernos en el dogmatismo y en las malas imitaciones", expone Edwards.
El escritor puertorriqueño, Luis Rafael Sánchez, fue otro que logró sacarle una media sonrisa a la antes periodista y ahora aristócrata. Sánchez dio un discurso magistral que logró poner de pie al salón principal del tercer nivel del Centro de Convenciones de Puerto Rico. Otro de los oradores fue Darío Villanueva, director de la Real Academia Española y presidente de la Asociación de Academias de la Lengua Española, y Rebeca Grynspan, Secretaria General Iberoamericana y única representación femenina entre los ponentes.
La inauguración cerró con las palabras del rey de España Don Felipe VI y Alejandro García Padilla, Gobernador de Puerto Rico, quien no perdió la oportunidad para dar rienda suelta a su carisma. "Yo nací allí donde las rs e arrastran y cambiamos la s por la j. Haré mi mayor esfuerzo", expresó Garcia Padilla ante la admiración y suspiros de las presentes.
Una vez finalizados los discursos, el salón se llenó de la música del cuatrista Christian Nieves junto a los trovadores Omar Santiago, Roberto Silva y Lenny Jeannette Adorno. El protocolo dictaba que nadie podía salir hasta que los invitados especiales, los reyes de España, dejarán el lugar. Letizia, de la mano de su esposo, dejó el lugar tan seria como llegó. Quizás reflexionando en la importancia del español y la repercusión de las palabras, ya sean habladas, escritas o enviadas a través de un mensaje de texto.
Este texto se produjo durante el Taller "El periodismo que cuenta", que conduce Juan Cruz, convocado por la FNPI en alianza con el Séptimo Congreso Internacional de la Lengua Española - CILE y con el apoyo de CAF, Banco de desarrollo de América Latina. El taller se celebra en San Juan Puerto Rico, del 15 al 19 de marzo en San Juan, Puerto Rico, en el marco del CILE 2016.