El taller de crónica "Hacer visible lo invisible", impartido en Managua por el cronista colombiano Alberto Salcedo Ramos, terminó el fin de semana con la edición y lectura de las historias que trece periodistas latinoamericanos y españoles, convocados por la FNPI, prepararon a lo largo de una semana intensa de trabajo en la capital nicaragüense. El último día del taller Salcedo Ramos dijo que uno de sus objetivos era "inyectar entusiasmo" entre los participantes para "creer en el periodismo". Fueron siete días de trabajo, entre horas escuchando los consejos del maestro de la FNPI en el Centro Cultural Pablo Antonio Cuadra de Managua y la faena de reporterismo en la ciudad, una capital desordenada que se extiende sobre una verde llanura cubierta de barrios y chabolas muy pobres, calles laberínticas sin nomenclatura visible y con más de 36 grados a la sombra. El último día del taller los periodistas expresaron su satisfacción por lo que consideraron una oportunidad no sólo para aprender sobre cómo escribir crónicas, profundizar en la investigación periodística, sino por la posibilidad de intercambiar experiencias con colegas de otras nacionalidades en una región prácticamente desconocida para la mayoría de los talleristas: Centroamérica. "Aprendía más que en cinco años de universidad", dijo Raquel Rivas, periodista española radicada en México. Rivas aprovechó el taller y la estadía en Nicaragua para investigar otras historias (historias de explotación, olvido e injusticia) que no son cubiertas para la gran prensa internacional. "He aprendido a no tener miedo y ver más allá de las preguntas tradicionales", dijo el periodista salvadoreño Raúl Eduardo Benítez. "Alberto te hace las preguntas que te obligan a demandarte más como periodista", agregó. El joven periodista nicaragüense Wilfredo Miranda aseguró que el taller organizado por la FNPI le ayudó a "renovar la forma en cómo contar historias". Miranda aseguró que en los siete días de trabajo en la capital nicaragüense "hemos aprendido a experimentar con nuevas formas para contar". La periodista venezolana Valentina Oropeza "que en el taller realizó su trabajo de reporterismo en el barrio Hugo Chávez de Managua" valoró la importancia que Salcedo Ramos da al reporterismo incansable y la "inmersión", así como los consejos a la hora de acercarse a las historias. "Alberto es muy generoso en cuanto a sus consejos e inspirador a la hora de recomendar formar proyectos personales", dijo Oropeza. En la última sesión del taller Salcedo Ramos trabajó con cada uno de los periodistas las crónicas que escribieron tras el reporterismo en Managua. El maestro de la FNPI habló sobre la importancia de los editores. "Los buenos editores son necesarios, porque un buen editor te ayuda a quedar mejor frente a los lectores. Me gustan los editores minuciosos, que se fijan en las palabras", dijo. En esa última sesión Salcedo Ramos entregó a los periodistas que asistieron al taller un consejo que pide a los maestros de la profesión para escribir crónicas. "Borren el primer párrafo", dijo. "Últimamente, cada vez que leo una crónica, el primer párrafo es malo. Bórrenlo y sigan escribiendo", aconsejó. El taller 'Hacer visible lo invisible' con Alberto Salcedo Ramos tuvo lugar del 23 al 28 de mayo en Managua, Nicaragua, en el marco del encuentro Centroamérica cuenta, y contó con el apoyo de Movistar Nicaragua.