Son altamente compartidas en redes sociales y esto las hace más peligrosas.
Cuidado con las sandías que tienen hueco el centro, pueden causar cáncer. La noticia se regó como pólvora durante este verano, época en que el refrescante sabor de esta fruta es especialmente apetecido.
La historia tenía un sustento que sonaba a ciencia: las grietas del interior de la sandía se deben al forclorfenurón, un compuesto químico que puede dar cáncer.
El video de YouTube que advierte EN MAYÚSCULAS sobre los peligros de las sandías cancerígenas tiene ya más de 3 millones de visualizaciones. ¡3 millones!
Lo único cierto aquí es que las noticias falsas se han tomado internet en esta época de la posverdad. Pero en especial las noticias falsas sobre temas de salud han demostrado ser particularmente frecuentes y variopintas.
Tanto es así que el diario británico The Independent publicó recientemente un artículo en el que advierte sobre las peligrosas consecuencias que esta desinformación en temas de salud puede tener para nuestras sociedades.
Entre las 20 historias más compartidas en Facebook el año pasado que incluyeran la palabra “cáncer”, más de la mitad contenían afirmaciones ya desestimadas por especialistas y autoridades médicas.
No es de extrañar que la noticia más popular sobre el cáncer en Facebook el año pasado fuera este artículo en el que se afirma que la raíz del diente de león contiene un compuesto que puede curar el cáncer en 48 horas.
Las autoridades británicas se han mostrado especialmente preocupadas por la cantidad de información falsa sobre la vacuna contra el Virus del Papiloma Humano (VPH) que circulan en la red. En Sudáfrica, las autoridades de salud se vieron obligadas a pronunciarse ante la alarmante difusión en redes sociales de una historia según la cual leer mucho podía causar cáncer en el cerebro de los niños.
El portal español Verne, un proyecto del diario El País para llegar a una audiencia más joven, también dedicó un artículo a este problema recientemente. Destacan que cuando crearon su sección del Bulos, habilitaron una dirección de correo electrónico para que los mismos lectores les hicieran llegar historias de dudosa credibilidad que encontraran por ahí. Los encargados de recibir los mensajes manifestaron su sorpresa ante la cantidad de historias falsas sobre el cáncer que reciben casi a diario.
Es cierto, estas noticias no son nuevas. Los bulos sobre pintalabios cancerígenos o sobre bebidas que curan milagrosamente el cáncer llevan décadas circulando. Pero las aplicaciones de mensajería instantánea y las redes sociales se han convertido en aliados perfectos para que esta desinformación circule más ampliamente.
"El cáncer se ha convertido en la enfermedad más temida por nuestra sociedad, por lo que es normal que la gente le tenga un miedo especial y comparta más información, aunque sea falsa", dijo Juan Antonio Cruzado, director del Máster en Psicooncología de la Universidad Complutense a Verne.
¿Qué hacer entonces?... Como todas las noticias falsas, las que tratan sobre temas de salud son también fáciles de detectar. La Revista Semana elaboró un listado de 5 elementos a tener en cuenta:
1. No crea en curas mágicas: aquellas noticias en donde se asegura que milagrosamente se encontró la clave para bajar de peso en una semana o la cura para las enfermedades crónicas es muy dudosa.
2. Mirada crítica: lea toda la información con mirada crítica, aún más, si piensa tomar decisiones basada en esa información. Es la salud la que está en juego.
3. Busque fuentes confiables: este es un principio básico del periodismo y también debería ser de los lectores. La idea es que la referencia a la que está acudiendo en busca de información tenga ante todo soporte científico avalado por instituciones, profesionales o medios con credibilidad.
4. Desconfíe si le quieren vender: desconfíe de aquella información que intenta vender productos para mejorar la salud. Estas noticias pobres de sustento científico y basadas en experiencias personales, pueden poner en riesgo su salud con productos que se venden como “naturales”: Natural no significa que sean inofensivos.
5. Nada reemplaza la consulta con el médico: es importante tener claro que todos los organismos son diferentes y reaccionan distinto ante los tratamientos, por ello no se debe creer que los artículos están escritos basados en casos particulares.
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