Este 7 de abril se celebra el Día Mundial de la Salud
La cobertura profesional de historias sobre suicidios es uno de los temas que ha promovido la Organización Mundial de la Salud (OMS), a propósito del Día Mundial de la Salud, que este viernes 7 de abril estará dedicado a hablar sobre la depresión.
De hecho, el suicidio es una de las consecuencias más comunes de una depresión mal tratada. Cada año se suicidan cerca de 800 000 personas en el mundo.
Aunque América Latina es una de las regiones del mundo con menor tasa de suicidios (un promedio de 6.5 por cada 100.000 habitantes), hay países como Uruguay y Cuba que históricamente han presentado tasas más altas.
A propósito, resaltamos cuatro respuestas del maestro Javier Darío Restrepo en el Consultorio Ético de la FNPI, relacionadas con la manera de informar responsable y profesionalmente en aquellas ocasiones en que un suicidio ocupa los titulares.
1. Los frecuentes casos de suicidio nos están creando un problema ético: ¿Cómo informar sobre estos casos? ¿Deberíamos callarlos para evitar que se multipliquen?
R: Los manuales de estilo recomiendan la cautela al informar sobre suicidios por cuanto una información sensacionalista o sin cuidado puede llegar a estimular a potenciales suicidas. Habría que agregar la posibilidad de que la información sea irrespetuosa u ofensiva para los parientes de la víctima y para la víctima misma. (Respuesta completa)
2. ¿Con qué criterios se debería manejar el tema del suicidio en los medios?
R: Los manuales de estilo previenen a los periodistas para que las noticias sobre suicidio sean objeto de un cuidadoso tratamiento a fin de evitar el manejo sensacionalista que propiciaría el carácter del tema, o la información ligera que prescinde de los posibles efectos de estas noticias.
El medio sensacionalista encuentra una rica veta de estímulos para sus receptores en estos episodios extremos, en que entran en juego la muerte, los dramas personales que conducen a la muerte y las pasiones que la explican o que tienen origen en ella.
Por tanto estas noticias atraen la atención con facilidad y pueden desarrollarse de modo interesante sin necesidad de mucho trabajo o talento. Es, por tanto, una noticia fácil. (Respuesta completa)
3. Hubo una época en que se multiplicaron los suicidios y en el medio en que trabajaba, un periódico vespertino, se le asignó a un periodista el cubrimiento de estas noticias a pesar de la acusación que otros medios hicieron responsabilizando al vespertino por los muchos casos de suicidas. ¿Tenía sentido esa acusación?
R: Tenía sentido. De hecho esta es la clase de información que los manuales de estilo señalan como de alto cuidado. Es, en efecto, una noticia de particular sensibilidad porque puede dar información y estímulo a personas que están contemplando la posibilidad de suicidio. Estas personas están en situación de incertidumbre porque no están seguras de una decisión que aplazan, o porque no logran decidir el modo de su muerte, o el lugar, o el momento, o dudan de su propia voluntad de morir. Las noticias sobre suicidios pueden aportar respuestas a esas preguntas o convertirse en estímulos para decidir. (Respuesta completa)
4. ¿Cómo cubrir éticamente noticias sobre suicidio?
R: Son muchos los caminos que conducen al mal periodismo. En cambio, cuando se informa sobre estos hechos con la idea de prestar el mejor de los servicios, aparecen los objetivos posibles: notificar a la sociedad sobre un fenómeno que debe ser mirado como una alerta: el menosprecio de la vida humana, incluida la propia mostrar y provocar solidaridad con la familia impedir que sobre el hecho se de una mirada superficial que lo trivialice y lo convierta en una señal equivocada. (Respuesta completa)
***
Fotografía: unsplash en Pixabay | Usada bajo licencia Creative Commons.
***
También recomendamos leer: Diez recomendaciones para la cobertura en salud desde la televisión y el video
***