¿Qué posición deberían tomar los medios frente a casos de abuso de poder?
Respuesta: Lectura de los códigos y de los manuales de estilo deja la persuasión de que hay una motivación guía para el periodista: servir al bien común. Es una motivación abstracta que adquiere un rostro concreto en el lector, oyente o televidente, en cuanto ese servicio al bien común lo beneficia como parte de una sociedad. Se trata de informar para servir a ese ciudadano y a través de él a la sociedad. Teniendo esta idea enf mente el periodista define la naturaleza de su relación con el poder. El más legítimo de los poderes es el que está al servicio de la gente; y el periodista, como servidor del bien público, tiene la tarea de vigilar para que el poder cumpla ese servicio. Esto lo convierte en los ojos vigilantes de la ciudadanía frente al poder, para proponer, aprobar o rechazar. El poderoso, desde luego, puede ver al periodista como su fiscal y como el custodio de los límites del poder; esto explica la frecuencia con que los poderosos presionan para cambiar ese papel del periodista y convertirlo en su aliado. El ideal ético es que su lealtad primordial sea para el ciudadano. No para el poderoso. Es una actitud que implica un equilibrio entre dos extremos: el de la obsecuencia y servilismo frente al poder, o el de la oposición por la oposición. Distanciado del poder, el periodista no lo considera su amigo, ni su enemigo, sino un potencial servidor del bien común.
Referencia Bibliográfica
El código de la Comunidad Europea de Periodistas lo expresa así: "Toda la acción periodística debe estar dirigida al bien espiritual, social, intelectual y moral de la comunidad". La Federación Latinoamericana de Prensa en el preámbulo de su código, proclama: "la información, concebida como bien social, concierne a toda la sociedad". Por eso en su primer artículo este código ordena: "el periodismo debe ser un servicio de intereses colectivos, con funciones eminentemente sociales dirigidas al desarrollo integral del individuo y de la sociedad". Estas expresiones se repiten en otros códigos, como el de los periodistas belgas: "el periodista es ante todo un servidor del interés general. Debe promover y defender todo bien material, espiritual, intelectual y moral cuya salvaguardia sea útil a la comunidad nacional". Es lo que el código brasileño llama "un compromiso indeclinable con la comunidad". El código de Dakota del Sur, Estados Unidos, lo denomina "bien de la sociedad, honorable intento para servir a la sociedad y no a propósitos egoístas". Los periodistas españoles afirman en su código: "el servicio al bien común y al interés público debe ser tenido como un objetivo primordial para todos los periodistas". Por su parte los periodistas franceses son enfáticos: "el periodista sitúa el interés general por encima de los intereses particulares y sobre la consideración de las personas". En el código de los periodistas de Ghana está expresado como un compromiso colectivo: "buscaremos y serviremos sin miedo ni favoritismos el interés público".